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Etiquetado Nutri-Score

Entrevista a Maira Bes Rastrollo

Doctora Maria bes Rastrollo
Nutri-Score es una herramienta validada por la investigación científica, aunque hay que reconocer que no es totalmente perfecta y que se necesitan campañas de educación nutricional sobre cómo usarla

Maira Bes Rastrollo es Catedrática en el Departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Navarra, donde imparte docencia en Epidemiología y Salud Pública. Investigadora en el Proyecto SUN, es autora de más de 220 artículos científicos en revistas nacionales e internacionales y ha sido citada más de 10.000 veces.

Recientemente desde el Proyecto SUN publicaron un estudio pionero en el que se usó Nutri-Score para valorar la dieta de la cohorte. ¿Cuáles fueron las conclusiones principales del estudio?

Aquellas personas con un mayor consumo de alimentos de peor calidad nutricional según el algoritmo de Nutri-Score presentaron una mayor mortalidad total y mortalidad por cáncer en un estudio de más de 20.000 personas seguidas durante una mediana de seguimiento de 11 años.

Los resultados no mostraron una asociación entre la mortalidad cardiovascular y la baja calidad de la alimentación, aun considerándose nutrientes como las grasas saturadas, las cuales se relacionan con las enfermedades cardiovascular, según la OMS. ¿Cuál considera que puede ser la causa?

Probablemente se deba al bajo número de eventos cardiovasculares observados en una cohorte relativamente joven. De hecho, el estudio publicado recientemente por Carolina Donat-Vargas con la cohorte ENRICA sí que ha podido observar también un mayor riesgo de mortalidad cardiovascular asociado a un peor perfil nutricional utilizando también el algoritmo Nutri-Score.

Recientemente, la comunidad científica se ha posicionado a favor de Nutri-Score mediante un comunicado que usted suscribe. ¿Cuál es, en su opinión, la fortaleza principal del etiquetado Nutri-Score?

Dar la capacidad al consumidor en el momento de compra de poder comparar, según el perfil nutricional de los alimentos, los alimentos iguales pero de diferente marca, o alimentos de la misma categoría o alimentos consumidos en las mismas condiciones de consumo, por ejemplo bollería o cereales de desayuno, utilizando una herramienta validada por la investigación científica, aunque hay que reconocer que no es totalmente perfecta.

¿Qué limitaciones tiene Nutri-Score y cómo cree que se podría solucionar?

Nutri-Score no es perfecto y tiene limitaciones que se deberían de subsanar antes de poner en marcha la implementación, como por ejemplo la clasificación del aceite de oliva virgen extra con la mejor calificación posible, una A, en base a la mejor calidad científica que se puede disponer en ciencia: la procedente de ensayos experimentales (PREDIMED y CARDIOPREV). Por otro lado, nuestro estudio demostraba que si cambiábamos la clasificación del aceite de oliva de la C a la A mejoraban los resultados obtenidos con el Nutri-Score.

Nutri-Score no clasifica a los alimentos como sanos o insanos. Será difícil que la población no haga comparaciones absolutas entre alimentos de diferentes categorías. Este problema se tendrá que solucionar poniendo en marcha campañas bien diseñadas de educación nutricional a la población y explicación del uso del Nutri-Score.

Los alimentos que deben promocionarse para seguir una dieta saludable como las frutas o verduras o productos mínimamente procesados no llevarán el etiquetado Nutri-Score.

A día de hoy, Nutri-Score es un etiquetado complementario y voluntario. ¿Cree que su implantación obligatoria sería positiva, en línea con las iniciativas que han surgido en estos últimos tiempos?

Desde el punto de vista de la salud pública, se ha demostrado que la auto-regulación no funciona, por lo que la implementación debería ser obligatoria en algún momento, al menos para los productos ultraprocesados, cuando se subsanen los problemas de Nutri-Score.

El logotipo Nutri-Score está diseñado para facilitar la comprensión de la calidad nutricional de los alimentos del consumidor. ¿Qué otras acciones considera necesarias para lograr una alimentación más saludable en la población?

El logotipo frontal debe ser solo una herramienta en el marco de las políticas nutricionales de salud pública. Otras acciones necesarias a considerar son la implantación de una educación nutricional a la población a todos los niveles con unas guías alimentarias claras y decididas sin posibles conflictos de interés que dejen claro que es lo que se debe de consumir pero también que alimentos hay que evitar.