SOLÍS: cuando un legado y la sostenibilidad se juntan

El primer tomate frito de España

La marca SOLÍS, pionera en la elaboración de tomate frito en España, nació del espíritu emprendedor de Juan José Solís, un farmacéutico que en los años 40 lanzó la popular Leche de Almendras SOLÍS.

Ya en los 60, obtuvo un gran éxito comercial, primero, con el lanzamiento de la mayonesa SOLÍS y, luego, en 1964, con el primer tomate frito del mercado español. La innovación fue una auténtica revolución en el segmento de las ayudas culinarias de la época. En solo dos años, vendieron 2 millones de unidades.

En la actualidad, SOLÍS está presente en más de 3 millones de hogares en España, consolidándose como el tomate frito de confianza para los consumidores, gracias a su delicioso sabor casero que gusta a toda la familia.

Una apuesta por Extremadura

Desde 1975, la fábrica de SOLÍS está ubicada en Miajadas (Extremadura). En 1985 pasó a formar parte de Nestlé, reforzando su compromiso con el desarrollo local. En los años 90, la planta comenzó también la producción de las salsas BUITONI.

Desde el año 2000, la Compañía empieza a colaborar con la empresa extremeña CONESA, situada a menos de 50km de la fábrica, para que se encargue de transformar los tomates en el concentrado de tomate con el que se elaboran las diferentes salsas de tomate.

Actualmente, la fábrica de Miajadas cuenta con 4 líneas de producción y una plantilla media de 70 personas. Su actividad tiene un impacto económico clave en la región, con una aportación de más de 10 millones de euros anuales.

Solís, un referente en sostenibilidad