El Maresme estrena un nuevo sistema de reciclaje de cápsulas monodosis de bebidas

• El objetivo es el reciclaje integral, tanto de los materiales que componen la cápsula como del residuo orgánico de su interior.
  
• El sistema de recogida permite reciclar tanto las cápsulas de aluminio, de Nespresso, como las de plástico, de Nescafé Dolce Gusto.
  
• Los puntos verdes del Maresme serán los lugares de recogida de las cápsulas usadas, las cuales se centralizarán después en el Centre de Tractament de Mataró.

Mataró, 27 de junio de 2012.— Los municipios del Maresme, a través del Consorci per al Tractament de Residus Sòlids Urbans del Maresme y el Consell Comarcal del Maresme, conjuntamente con la empresa Nestlé, han puesto en marcha la red de recogida y posterior reciclaje de las cápsulas monodosis de bebidas. La legislación actual no permite que estos tipos de residuos se depositen en los contenedores amarillos y, en consecuencia, los puntos verdes del Maresme, se convertirán en los centros de recogida de los mismos.

Cada punto verde tendrá dos contenedores de 120 litros, uno para las cápsulas de aluminio (Nespresso) y otro para las de plástico (Nescafé Dolce Gusto). Una vez recogidas, estas se trasladarán al Centre Integral de Valorització de Residus del Maresme del Consorci per al Tractament de Residus Sòlids Urbans del Maresme, que actuará como Centro logístico.

Mensualmente, Nestlé se hará cargo del traslado de todas las cápsulas de aluminio y plástico que se han recogido hasta las diferentes plantas de reciclaje en las cuales se tratarán. Como resultado, se podrán reciclar por separado los materiales que componen la cápsula y obtener compuestos de calidad a partir del residuo orgánico de su interior.

El sistema de recogida selectiva de cápsulas fue pionero en Suiza. En Cataluña, se inició hace un año en Barcelona y su Área Metropolitana. El Maresme se convierte, con estos acuerdos, en uno de los primeros territorios donde se implanta este sistema de reciclaje de cápsulas de bebidas monodosis. Sin duda, la puesta en marcha supone una extensión del servicio público de los puntos verdes y una mejora tanto para la gestión sostenible de residuos, como para la promoción de actitudes responsables y buenas prácticas de los consumidores.